Roberto Ruiz, el artesano mexicano que ‘conquistó’ a la reina Isabel II.

“Maestro, me han dicho que tus piezas son obra de arte pero no lo son, ¡son joyas!, y como joyas deben de ser tratadas”, le dijo la reina Isabel II al artesano mexicano Roberto Ruiz (1928-2008).
Después de estas palabras, la monarca realizó una ceremonia privada en el Palacio de Buckingham, donde el artesano fue el invitado especial.
Frente a Isabel II, en un cojín rojo, estaban dos piezas: un niño campesino y un camafeo con el rostro de la reina cuando tenía 17 años, tallado en marfil con plata. Entonces, la monarca, con la espada real las tocó y declaró las piezas de Roberto Ruiz como “joyas de la corona” en 1981.
Entre los coleccionistas de las obras de Ruiz se encuentran ex presidentes Luis Echeverría, Miguel de la Madrid, Carlos Salinas, Ernesto Zedillo y José López Portillo. También Carlos Monsiváis, María Teresa Pomar eran coleccionistas.
El Fondo Nacional de Artesanías, el Fondo Cultural Banamex y el Museo de Culturas Populares del Instituto Mexiquense de Cultura tienen la mayor parte de la obra de Ruiz, quien recibió en 1988 el Premio Nacional de Ciencias y Artes en la modalidad de Artesanía Popular y cuenta la leyenda que solo un diente y una muela del propio artista fueron las piezas humanas que talló.
Un dato importante es que solo existe una fotografía oficial donde se pueden apreciar las 17 piezas que la reina Isabel II declaró como “joyas de la corona”, pero no de las dos primeras que hizo Roberto Ruiz, de hecho, su hijo dice que la reina no volvió a mostrar las piezas en público.
Los hermanos Ruiz aseguran que días antes de la muerte de la reina, recibieron un mensaje de ella, quien les envió The Day of the Dead: A Visual Compendium, de la destacada curadora Chloe Sayer.
“Curiosamente, antes del fallecimiento de la reina, llegó Chole Sayer, unos 15 días antes, para entregarnos el libro, y nos dijo que la reina nos mandaba esta última publicación. Un libro extraordinario con una calidad impresionante que muestra una catrina de mi padre, y es lo último que nos mandó la familia real recordándolo”.